Amor tardío

Se enamoró cuando nada lo presagiaba. Había dado la espalda a su destino y ahora debía reflexionar. Aquella mujer irrumpió en su vida de forma inesperada. Arrasó con su soledad, llenando de golpe su corazón casi oxidado. En otro tiempo se entregaba sin pensar qué pasaría, pero esta vez no. Esta vez era algo tan fuerte que dolía, se le salía el pecho de emoción... el azar jugó sus cartas y aunque a edad algo tardía, le tocó en el reparto el as de corazones. La intuición le decía que no había nada que temer, aquel era su color y suerte."Estaba escrito", se decía. Juró dejarse llevar y como el río permanecer atento a cada paso, a cada señal del caudal: anegar en las riadas, recogerse en la sequía... y lo que sí sabía es que nada, ni nadie, podría evitarle llegar al mar, algún día.©